lunes, 28 de noviembre de 2011

In the wake of Poseidon (1970) - King Crimson




Puntuación: 9+

Mejor tema: In the wake of Poseidon

Tracklist
01. Peace -a begginning
02. Pictures of a city
03. Candence and cascade
04. In the wake of Poseidon
05. Peace -a theme
06. Cat food
07. The devil's triangle
08. Peace -an end



  Robert Fripp sigue siendo un verdadero maestro para lo suyo (y nunca dejará de serlo).  Dicen que es un clon del primer LP de Crimson, y lo admito. ¡Pero eso no tiene porqué ser un punto en contra! Las composiciones siguen siendo espectaculares, con temas llenos de hermosura, violencia, tranquilidad, melancolía, tristeza y de esas oleadas imparables de sentimientos. El estilo general aquí es similar al de su primer disco, pero quédense tranquilos que el que le sigue (Lizard) cambia completamente. Igualmente In the wake of Poseidon sigue siendo muy bueno.
  En cuanto a la formación de músicos de la banda, Michel Giles e Ian McDonald expresan su deseo de abandonar el grupo. el primero termina por abandonar la formación, pero Giles no lo hace. Lake deja de tocar el bajo, y pide quedar como vocalista, debido a la complejidad que se presentaba a la hora de tocar el bajo y cantar a la vez, interpretando temas tan compuestos. Mel Collins sustituye a McDonald en las flautas, y Keith Tippett en los teclados.

  Todo comienza con el intrascendente Peace –a beggining: Una pieza a cappela en bajo volumen, que no se resalta para nada, pero tampoco molesta.  
  El disco empieza de verdad con Pictures of a city, el 21st century schizoid man de este disco con bandas de vientos avasallantes, explosivas y violentas, grandes polirritmias donadas por M. Giles y una melodía similar al primer tema del debut de KC. Los riffs de la banda de saxos son geniales y las conjugaciones polirrítmicas son imparables. Hay también un intermedio de silencio, en el que cada integrante de la banda se mueve con una precisión sobrehumana.  Todo esto conforma a la canción en una verdadera joya.
  El tema termina en una locura improvisada en la que todos los instrumentos donan su parte, y se escucha una guitarra acústica con un sonido algo tosco pero hermoso, que se conjuga a la perfección con la parte cantada por Haskell, un amigo de Fripp. Candence and cascade es una composición muy pacífica, aliviante, y está excelentemente interpretada.
  Entonces se escucha un mar de mellotrones atrapante, melancólico, glorioso y emotivo liderado por Fripp, al que le procede una preciosa melodía, cosa que conforma una de las más taciturnas composiciones del grupo. La batería, como en todo segundo en la que está presente, busca cada recoveco para lucirse. El intermedio es realmente precioso: la guitarra emite por cada punteo un grito agonizante que termina de hacer esta canción de las mejores del Rey Carmesí. Los coros son excepcionales: le agregan otro toque dramático al tema.
  Escuchamos el dimminuendo que va acabando de a poco con el gran apocalipsis creado. Entonces se escucha la tranquilizadora guitarra acústica de Peace –a theme. Los Peace no se caracterizan por ser de lo más original y trascendente del disco, pero son disfrutables dentro de todo. Es en este pasaje de guitarra clásica donde se puede separar el disco en dos. In the court of the Crimson King terminó, y esto da lugar a las nuevas ideas que Fripp tiene en la cabeza.
  Cat food es un “pop progresivo” que tiene con una melodía graciosa, divertida y funkie, y un piano alocado que innova en la instrumentación Crimsoniana y que en Lizard se usará nuevamente. Es, además, una forma de homenaje a los Beatles. Yo creo que si no fuera por la incesante e improvisada batería, que da indudables indicios de que lo escuchamos es King Crimson, este tema tendría un gran estilo Beatle. Por partes, Robert Fripp imita a la perfección los solos de George Harrison. No hay que pasar por alto el gran trabajo en el piano de este tema, con esas que nos ahoga con acordes jazzeros.
  Concluido Cat food escuchamos acercándose un ejército que marcha con majestuosos mellotrones y redoblantes. Hablo del impresionante The devil’s triangle, un tema experimental que una vez bien escuchado, les aseguro que les encantará. Para algunos es monótono, pero esa genial instrumentación cargada de autoridad y violencia me fascina. Los locos pianos que estaban en Cat food se hacen todavía más energúmenos aquí. ¿Alguien notó la demencia de la melodía interpretada por los teclados raros del final del tema? Esta composición nos anticipa lo que va a ser Lizard. Me encanta cuando se escuchan fragmentos del coro de The court of the crimson King.
  La última canción es Peace –an end, probablemtente el mejor de la trilogía. Tranquilizante, pero como ya he dicho, intrascendente.
  
  Este disco ha sido criticado por ser parecido a su predecesor. Hay que admitir que los primeros 5 temas son muy parecidos, pero después todo cambia y Robert nos muestra lo que va a ser el próximo álbum del Rey Carmesí. Creo que restar puntos a In the wake of Poseidon por ser un "clon" de su antecesor es infundado. Si bien lo es en gran parte, se disfruta muchísimo igual. Fripp juega con Pictures of a city, Candence and cascade y con In the wake of Poseidon, y hasta ahí se mantiene en las líneas de sus anteriores composiciones. Pero luego tira todo al diablo, y decide hacer estos magníficos y dementes pasajes que aparecen en la segunda mitad del disco. Como resultado final, obtenemos un disco cuyas mitades son diferentes: una retoma el “antiguo” estilo del grupo y otra explora nuevas fronteras, nos da un adelanto de lo que sería la próxima genialidad en forma de pasta de este magnífico grupo y de paso experimenta más para buscar su nuevo estilo.
  Un 9 es la calificación que este disco se merece: los Peace no son nada extraordinarios, y conforman mucho relleno. Además por mas buenos que sean los temas, In the court of the crimson King es evidentemente superior.


     

5 comentarios:

  1. Vaya, un repaso a la discografía crimsoniana; esto me suena xD
    Esperaré a ver qué dices de Larks' Tongues in Aspic y Starless and Bible Black, ¡mis archienemigos!

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  2. Dani, Starless and Bible Black también es "archienemigo" mío. Es, a mi modo de ver, la peor producción del Rey Carmesí de los 70's.

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  3. Te juro que lloré de emoción en mi interior cuando escuché In the Wake of Poseidon. Es hermosa, es un himno, es sublime.

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  4. Discrepo con Peace - An End. En mi opinión es la cúspide del disco entero y encaja a la perfección con el final demencial que supuso The Devil's Triangle.

    El disco aún lo estoy asimilando, sin embargo puedo anticipar que nunca esperé un final como ese. Es mágico. Un poco deprimente en sus letras finales, pero vamos, que desnuda el alma humana y tiñe al oyente de una lección que es dura y chocante pero sencilla de aprender. Es hermoso. Es King Crimson.

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    1. Las letras de Seinfeld son muy buenas. A veces se pueden tornar difíciles de entender en inglés; pero sino, la poesía de Peter, como vos acertadamente dijiste, "desnuda el alma humana y tiñe al oyente de una lección que es dura y cochante pero sencilla de aprender" (de paso te digo: ¡excelente descripción!).

      En cuanto a Peace - an end, yo también creo que es un buen final. Sin embargo, pienso que no por eso se merece estar marcada en rojo.

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