Puntuación: 10+
Mejor tema: Ah, te ví entre las luces
Tracklist
01. Bubulina
02. Como mata el viento norte
03. Boletos, pases y abonos
04. No puedo verme más
05. Rock
06. Por probar el vino y el agua salada
07. Ah, te ví entre las luces
Antes que nada, hay que dar a conocer los miembros que componen este disco. En voz y teclados, está el famoso y reconocido Charly García, mientras que el otro tecladista es mi admirado Cutaia en su época de auge (que había grabado Pescado 2 con Pescado Rabioso). En guitarra tenemos a Gustavo Bazterrica, en baterías a Moro y en el bajo, al místico maestro José Luis Fernandez (ex Crucis).
El disco homónimo de La máquina es de un rock progresivo con arreglos sutiles, envolventes atmósferas, gran presencia en los teclados y virtuosismo por todas partes. Pero tampoco se crean que lo único que van a escuchar es esto: hay fusiones como el dulce pop de Como mata el viento norte, la funkie Boletos, pases y abonos, el relajante Rock y el country Por probar el vino y el agua salada.
Ya Bubulina nos hace llorar. Unos grandiosos teclados abren el tema acompañando una misteriosa melodía. La apasionada guitarra de Bazterrica es simplemente maravillosa, y el estribillo es una de las cosas más alegres que escuche. Bubulina era una prostituta en la película Zorba el griego. Lo de “navidad en el cielo” se debe, supone mucha gente, a la escena de esta película en la cual este habla con ella. El resto de la lírica de la canción es un miesterio para la mayoría: lo único que se sabe (y de lo que no se está muy seguro) es que cuando Charly nombra a un “nuevo ser” es porque tenía proyectos de ser padre.
Como mata el viento norte empieza más o menos igual a su antecesor. Las melodías de este tema son hermosísimas: son el espécimen de pop más puro del disco. ¿Oyeron la inmensa felicidad que trasmite el estribillo de esta canción? Un highlight definitivo. La letra habla sobre un mendigo que en realidad es rico (porque tiene joyas), pero como los habitantes del lugar en que vive son todos ciegos no saben apreciar su riqueza. Una buena metáfora para expresar el desperdicio de potenciales que hay en la sociedad.
Boletos, pases y abonos es un tema bastante funk cuando de voz hablamos. El estilo general de la instrumentación es un blues movido con remates de hammonds. Esta canción cuenta nuevamente con un estribillo genial, un intermedio lento y atmosférico con hermosas improvisaciones de guitarra y una hermosa parte instrumental luego de la segunda repetición del estribillo. Pero lo mejor de este rock es el pegadizo riff que se presenta al final, con un teclado soleando impresionantemente, y una guitarra maravillosamente ejecutada. La letra es una proclamación de disconformidad por parte de Charly hacia su público, en la cual él dice que los artistas son objetos de uso de la sociedad, mientras que ellos hacen felices a los miembros de esta.
No puedo verme más se presenta con una guitarra frenética y unos rockeros y alocados coros. Nuevamente la instrumentación con la que cuenta este tema es genial, cosa que la hace merecedora de estar marcada en rojo. La lírica del tema habla sobre la falta de personalidad en la sociedad, y dice que este comportamiento social está para ocultar verdades interiores.
Rock es la canción más relajante del disco, y cuenta con una maravillosa parte vocal y unos distintivos pianos. Pero eso no es todo: luego se presenta un riff rockero que rompe con todo y conlleva a una progresiva parte instrumental. La letra proclama la despreocupación y el disfrute de la vida, tal como lo hacían los hippies.
Por probar el vino y el agua salada es un hermoso country que cuenta con una de las mejores melodías del disco, y es la canción menos instrumental del disco. Tal vez lo peor de esta canción sea el artificial y horripilante sonido del violín eléctrico que suena al principio. ¿Qué les costaba amplificar vía aire un violín clásico y ya? Pero las magníficas melodías de Charly contrarrestan eso. La lírica trata la tristeza que deben soportar las autoridades a la hora de ejercer su cargo.
Ah, te ví entre las luces es, para mí, junto con Hipercandombe uno de los mejores performances instrumentales de La máquina. Además es el único número puramente progresivo del disco. El estribillo no hace otra cosa que ponerme la piel de gallina y los ojos llorosos, y la instrumentación es simplemente fantástica: cuenta con perfectas partes de teclado y guitarra. Algo que hay que resaltar por sobre todo en esta canción es la gigante emotividad de la primera parte. El final cuenta con uno de los mejores riffs de bajo jamás creados en la historia del rock progresivo nacional, y con el mejor solo de guitarra del disco. La repetición de la línea “Ahh te ví entre las luces” nos vuelve a sumir ante la inmensa pasión trasmitida por su melodía, y el solo de piano que viene luego nos para el corazón. La letra es rara, y leí por ahí que habla de los recitales como ícono del sentimiento juvenil argentino.
Muchos lo critican por la falta de volumen y presencia que tiene la voz de Charly en todo el LP, y eso es algo que no puedo negar, pero sin embargo no me molesta, ya que la parte vocal no es el único fuerte de este grupo. Además Nito Mestre había impuesto una moda en la cual llegar bien a los agudos era fundamental (cosa que el cantante de este grupo logra a duras penas), y esto hace que el líder de Sui Generis tenga miedo a ser rechazado por su público. Por eso es que García decide bajar el volumen de su voz en las grabaciones.
El disco homónimo de La máquina de hacer pájaros es una obra en la cual el rock progresivo reina, pero casi nunca en su estado puro. Los músicos son excelentes todos, pero el mejor es sin dudas José Luis Fernandez, el bajista: uno de los mejores bajistas de rock argentino. Lo peor es que luego de grabar unos pocos discos en su país natal, viaja a Estados Unidos y sigue trabajando allí ¿Cómo permitimos que tamaño instrumentista se vaya del país? Moro, para variar, es nuevamente un baterista excepcional, y Bazterrica (por más que tenga menos presencia que, por ejemplo, los teclados) se luce cuando le toca hacerlo. A Cutaia y Charly les toca lucirse: no hay tema que no tenga por lo menos un solo de teclado aquí.
Charly nunca fue de revolucionar la música argentina (para eso estaba Spinetta): el sólo se adaptaba a las corrientes de una manera excelente. Pero, sin embargo, este disco es una excepción: Es el primer grupo de rock nacional que tiene dos teclados (Luis Alberto incorporaría esta idea en Jade pero en los 80).
NO hay como Bubulina para mí
ResponderEliminarUnas cositas:
ResponderEliminarCutaia no había grabado en ese mismo año Pescado 2. Pescado 2 es de 1973, el homónimo de la máquina es de 1976. Charly en 1973 estaba todavía con Sui Generis..
Por otro lado, Moro no fue baterista de Invisible! Fue baterista de Serú girán... Fue el "Pomo" Lorenzo el batería de Invisible!
Lauta disculpa, tenés razón: me confundi. A Pomo y Moro me los confundo a cada rato, y por eso escribí cualquier cosa. En cuanto a las fechas de grabación de Pescado 2 también me equivoqué y todavía no entiendo porqué, porque las fechas de grabación del flaco las tengo claras. Mis disculpas: ya corregí todo.
ResponderEliminarExcelente análisis del disco!! Mejor tema sin duda Ah, te ví entre las luces!
ResponderEliminarPara la próxima Películas!
Saludos!
¡Gracias! Todavía no pensé si revisar o no películas, pero en cuanto lo escuche bien subiré una review.
ResponderEliminarcual es la contraseña?
ResponderEliminarEl mejor grupo que vi en vivo en toda mi vida....en vivo sonaban increible!!!!
ResponderEliminarsé que la cronología no deja a la teoría existir, pero ..... Ah, te vi entre las luces es la continuación Viernes 3 AM, el se suicida, entonces ella lo sigue, esperando que den las 3 para matarse también.. y por fin él la ve otra vez, entre las luces, con su cara toda azul... jajajaja maldita sea que no cuadren los tiempos...
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