Puntuación: 9+
Mejor tema: Islands
Tracklist
01. Formentera lady
02. Silor's tale
03. The letters
04. Ladies of the road
05. Prelude: song of tue gulls
06. Islands
Islands es un disco de trasición para las futuras composiciones trash-vanguardistas y los riffs cuasirobóticos de Lark’s Tongues in Aspic.
Gordon Haskell, para alegría de muchos, es echado del grupo y es reemplazado por Boz Burrel. Ian Wallace reemplaza a Andy McCollough, mientras Collins, Fripp y Sienfield siguen activos en el grupo. Se corren rumores de que Elton John es rechazado por la banda, y Greg Lake declara que no quiere adherirse nuevamente a la formación del Rey Carmesí por diferencias musicales y, fundamentalmente, humanas.
De la locura esquizofrénica de Lizard, el grupo pasa a hacer algunas canciones violentas y a crear las mejores atmósferas en la historia del grupo. A la fusión de rock y música clásica del Lagarto, se le suma otro ingrediente: el avant-garde. Fripp, en vez de crear locuras con influencia académica, compone temas en que esta inclinación está presente pero de una forma distinta: ahora los vientos y cuerdas de la banda nos erizan la piel (escúchese el tema homónimo). Robert también nos deja hermosas canciones con emotivas melodías y perfecto sonido.
El disco empieza con Formentera Lady: el pico vanguardista del disco. Sin embargo, esta experimentalidad no se ve como se veía en Lizard: ninguna otra composición de King Crimson resulta más ezquizofrénica que las de este álbum. Tal vez la canción se torne aburrida, pero la hermosa melodía interpretada por la voz le da un punto a favor. El final es apasionante: ese gigantesco crecendo me emociona.
Frenéticos platillos que nos anuncian el comienzo de Sailor’s Tale, que es uno de los últimos retazos de vanguardismo en Islands. Es una canción en la que la guitarra eléctrica y la batería son protagonistas.
The letters es un magnífico tema que contiene una hermosa melodía vocal, y que en un principio es pacífica pero luego, junto con los saxos, se torna más violenta. El saxo soplado (parece irónico, pero me refiero al sonido “aireado” que tiene) y el solo preciso de guitarra me encantan.
Ladies of the road tiene una guitarra jazzera y un desgarrador saxo. Los consistentes golpes de la batería y el bajo, siempre acentuando de una forma extraña, le dan un peculiar toque a la canción. Pero lo mejor es el intermedio con aire de vals y guitarras con sonido celestial. El final nos lo anticipa un fantástico y frenético solo de saxo, con un riff de teclado genial, y unos coros beatlescos vociferando “Ladies of the road!”.
La segunda parte del disco culminó, y la música clásica nos espera: una breve y hermosa obra aparece, nos deja boquiabiertos y nos demuestra que Fripp hacer rock porque le place. El tema es simple: bellísimas y voladoras cuerdas con pizzicato acompañando a un dulce y tranquilizante clarinete interpretando la melodía principal.
Islands es el tema definitivo del disco que lo contiene, que empieza con una flauta baja, y una voz interpretando una brillante melodía. Durante la canción se nos van presentando hermosos solos de saxo, corneta, y demás instrumentos, que nos sumergen en una paz inmensa, que va en cescendo hasta llegar a su cúspide repleta de acarmelados sonidos con una melodía cantada muy delicadamente y un emotivo melotrón.
Islands es un compilado de desgarrante pasión, hermosísimos arreglos, y sentimentales obras. Tal vez éste sea el pico compositivo de Fripp: los arreglos son simplemente maravillosos. Pero no solo estos se destacan, sino que también hay momentos rockeros y experimentales. King Crimson no deja de sorprendernos: lanza una gigante obra tras otra, y se da el lujo de cambiar totalmente de estilo en menos de un año. Música clásica, jazz, rock-blues y avant-garde son mezclados de manera perfecta en este disco.
Este LP se merece un 9+: las composiciones vanguardistas de la primera parte no son tan disfrutables como las otras del disco, y esta es la razón por la cual le doy ese puntaje.
Buen repaso. Algún día yo haré algo similar en mi blog, porque este es mi disco irrenunciable de KC. Le tengo tanto cariño que incluso aprecio las composiciones que para mí son menos atractivas.
ResponderEliminarIslands -la canción- es la joya del álbum, pero Sailors Tale no se queda muy atrás: sus pasajes de guitarra me parecen de lo mejorcito; otro tema catartico, vaya.
Fripp, uno de los tíos más genuinamente prolíficos del prog, está claro.
Yo personalmente no disfruto demasiado de Sailor's Tale. Sí, sin dudas Fripp es ultra prolífico. Sólo Zappa lo vence.
ResponderEliminarIslands no es una suite. Lo que suena en el tema es una flauta baja, no un saxo. Al final hay un solo de corneta. Basta con averiguar algunas cosas, aprender y leer el librito que viene con el disco.
ResponderEliminarEl disco no lo leí porque está en inglés y mi nivel en ese idioma no me basta para comprenderlo. Es la primera vez que veo que alguien en internet diga eso: es información rara y difícil de encontrar.
ResponderEliminarTal vez lo de la flauta baja y la corneta sean verdades absolutas e indiscutibles. Pero explicame porque pensás que Islands no es una suite.
Lo de la flauta baja y la corneta no son verdades absolutas e indiscutibles, son hechos concretos, por sus sonidos y sus registros. Y por que el disco lo dice.
ResponderEliminarIslands es una canción con estrofa y estribillo, A-B. Una suite tiene muchas secciones.
Saludos.